La realidad que nos
muestran cada día los medios informativos tradicionales – los Medios de
Manipulación Masiva, MMM- y la que todavía podemos ver en los canales
alternativos de internet son totalmente distintas.
A nuestras costas y a
nuestros aeropuertos llegan cada día oleadas de inmigrantes ilegales. Los españoles,
para viajar, necesitamos toda nuestra documentación perfectamente en regla,
pero ellos no, ellos llegan libremente a nuestra frontera y son instalados en
lugares mucho más dignos que los que tienen miles de españoles.
Se les proporciona un
móvil, dinero en efectivo, comida, ropa, etc. Para todo ello hay que organizar unos
presupuestos de dinero perfectamente planificados.
Supuestamente llegan
en pateras que realizan miles de kilómetros en condiciones marítimas que
cualquier experto te dirá que son imposibles. Salen de las costas
norteafricanas con la permisividad o la connivencia de las autoridades.
Si llegan a Canarias
se les traslada a la península. Deambulan por las calles de toda España. Tienen
que sobrevivir y para ello delinquen y atentan contra la libertad sexual; ocupan
viviendas y todo tipo de propiedades.
¿Alguien puede pensar
que todo esto no se puede parar ¿. Los MMM niegan esta realidad o la blanquean,
enseguida te dicen la fatídica palabra de “pobrecitos”. Te dicen que eso es así
y que no se puede modificar. Te dicen que las leyes les amparan y que no se
puede modificar. Aquí nada se puede modificar, nos tenemos que conformar.
Modificar una ley para hacer desaparecer delitos, como la ley de amnistía si es
posible y Felipe el de Zarzuela la firmará sin rechistar pero modificar todo
esto no es posible.
¿Alguien puede pensar
que todo esto está pasando en toda Europa por casualidad ¿.
Si haces la más
mínima crítica a todo esto eres una mala persona, un insolidario, un racista y
recibes el estigma de ultra, mega, extrema derecha.
Pero aquí no acaba el
plan. Se necesita que nuestros jóvenes no se puedan emancipar, que no tengan
una vivienda y por ende tengan dificultades para formar y una vivienda y tener
hijos. Baja la natalidad y ya tienen el argumento de que se necesitan miles y
miles de inmigrantes. Hay dinero para pagar todo lo que habíamos descrito para
los emigrantes, pero no hay dinero para ayudar a los jóvenes con la vivienda o
la natalidad.
Durante años los MMM
han escondido todo esto, pero ahora mucha gente se está dando cuenta de que el
que llegó ayer ilegalmente en una patera o el que saltó una verja y agredió a nuestros
policías tiene más pagas que la persona que llega a su jubilación después de
trabajar cuarenta años.
Todavía hay algo más
que destruir: nuestras tradiciones, nuestros valores y nuestra moral. Aquí
tiene un importante papel la destrucción de la religiosidad y el fomento de
otra religión destructiva de la
tradición cultural católica, que más allá de que se crea o no, de que se
practique o no es la tenemos mayoritariamente los españoles.
No, todo esto no es
por casualidad, está perfectamente organizado y planificado para sustituir a
una población europea por otra ajena perfectamente subvencionada y por tanto
manejada. Se destruye a las clases medias y a las clases trabajadoras tradicionales
europeas por nuevas masas incultas y manejadas con paguitas.
No es inmigración, es
una invasión planificada.
Alfonso Ruano
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